A finales de los años 60, un enigmático asesino serial azotó la bahía de San Francisco. Se trataba del “Asesino del Zodíaco”, uno de los casos que ha supuesto un mayor reto a los investigadores criminiales. Con muertes en su haber tan misteriosas como indescifrables, Zodiac (apodo con el que se auto bautizó) jamás pudo ser detenido o identificado y ni mucho menos olvidado. Tantas dudas y controversia ha sabido generar a los investigadores a lo largo del tiempo, que a día de hoy la policía no sabe con exactitud cuantos crímenes son atribuibles a este asesino. Continuar leyendo